Comprar una página web para tu PyME

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Ángel Torres Tagle

Comprar una página web para tu PyMe es uno de los procesos más divertidos y gratificantes que puedes tener como empresario.

Aún recuerdo el momento en el que decidí emprender con mi primera página web hace ya unos muy buenos años. Había una gran cantidad de dudas sobre qué sí y qué no debería estar comprando o considerando, miedos sobre ataques informáticos, y la constante duda de no saber por dónde empezar.

Cómo comprar una página web para tu PyME en 5 sencillos pasos

Para evitarte muchas de las dudas que tuve yo hace tiempo, quiero darte algunos consejos del sencillo proceso para poder poner en marcha tu negocio en línea.

  1. Tu idea en la web: Diseño y programación – Para comenzar el proceso, debes conseguir a un diseñador web que te ayude a convertir en realidad tu idea para la página. Procura primero tener muy claro cuáles son los objetivos de tu empresa y cómo cada uno de estos se tiene que reflejar en el sitio web. Esto hará mucho más fácil el proceso de diseño y programación del sitio, evitando tropiezos en fases avanzadas del proceso. 

Como una alternativa siempre está la posibilidad de comprar un templete de sitio web para plataformas autoadministradas como Wordpress, Blogger o Joomla. El único consejo en el que realmente quiero hacer mucho énfasis es que este va a ser una de las partes más costosas del proceso en general.

Busca obtener varias cotizaciones para poder comparar precios y recuerda, que en caso de que no quieras involucrarte en el mantenimiento del sitio mes con mes, pedir que se incluya en el precio.

  1. Dominio que lleve tu marca al estrellato – Ya con el sitio listo para salir al mundo, es importante que pienses primero cómo se va a llama tu página. El dominio es lo que ingresas en la barra de navegación, por ejemplo: mipagina.com.mx, y es el primer contacto de tu sitio con el Internet. Recuerda que debe ser lo más corto y fácil de recordar, sin perder relación con tu marca y productos. Este lo podrás adquirir con muchos de los registradores oficiales de dominio autorizados por la ICANN.
  2. Hosting para almacenar tu sitio – Ahora toca encontrar un lugar donde hospedar tu sitio web y traerlo finalmente a la vida. Esto lo harás a través de un servicio de hosting, que básicamente es como un inmueble para un sitio web.

Al igual que en el mundo real, en el virtual también hay todo tipo de tamaños y comodidades que no necesariamente puedes llegar a requerir. Usualmente los paquetes más básicos son más que suficiente para la gran mayoría de las PyMEs, al menos que estés pensando incluir pagos en línea, ya que esto es mucho más delicado y requiere medidas adicionales de espacio, rendimiento y seguridad.

Procura asesorarte con el equipo de ventas del proveedor de hosting para que te recomiende la mejor solución para tu negocio y después corroborar esta con algún conocido experto en la materia para que estés más tranquilo de que pagarás justo lo que necesitas. Recuerda que a medida que tu sitio vaya creciendo en necesidades, tienes la flexibilidad de moverte de un plan a otro sin ningún problema.

  1. Protege tu sitio de la mejor manera ante amenazas – No es por espantar, pero la web tiene sus propios peligros que muchas veces pasan desapercibidos por la mayoría de las empresas. Bajo el escudo de “¿Y por qué se van a fijar en mí que soy tan pequeño?” la gran mayoría de las PyMEs ignora que a veces las compañías que comienzan en la web son las más vulnerables ya que no tienen idea alguna de las diferentes maneras en las que pueden ser atacadas.

Muchos de los paquetes más sencillos incluirán protección para tu sitio a través de certificados SSL para conservar los datos de tus visitantes de manera privada, análisis y detección de malware para remover amenazas, firewalls para prevenir ataques de hackers y más, por un cómodo precio mensual y asistencia técnica muy puntual. 

Ofrece siempre la mejor experiencia 

Esto es solo la primera parte de lo que te debes de enfocar para comprar una página web para tu PyMe de la manera más sencilla.

Cada caso siempre será muy particular y podrá haber algunas ligeras variaciones en el camino, pero por más grande o complejo que sea el proyecto mi recomendación es pensar de esta manera: No escatimes nunca para ofrecer la mejor experiencia a tus visitantes y futuros clientes. Las oportunidades de hacer una buena impresión en línea en un ambiente tan competido como lo es hoy en día son contadas.

Trata de aportar algo único tanto con tu producto como con tu presencia en línea y esto ayudará a crecer tu marca y tu negocio rápidamente.